La dermatitis atópica tiene una prevalencia de un 20% en niños y está en crecimiento continuo. Suele aparecer en el 60% de los casos, antes del primer año de vida, y en el 85%, antes de los 5 años. Normalmente mejora e incluso llega a desaparecer en la adolescencia, pero un 5% estarán afectados en la edad adulta y las manifestaciones de la enfermedad son más severas.
La industrialización de las ciudades, el aumento de hábitos de higiene con productos no adecuados, el uso de detergentes con sustancias irritantes o el ritmo de vida cada vez más estresante , favorecen este aumento. Las manifestaciones más comunes de la dermatitis atópica son piel seca, con mucho picor, que evoluciona con eccemas y su localización será diferente en función de la edad. Para evitar al máximo, los signos y síntomas de la enfermedad, se pueden pautar una serie de recomendaciones:
-Hidratación constante para restaurar la barrera cutánea. Se recomiendan bálsamos, lociones o cremas que contengan ácidos grasos omega y usarlos después del baño, con la piel un poco húmeda para facilitar su absorción.
- El baño es mejor que la ducha, con agua templada que no sobrepase los 10 minutos. Se recomiendan detergentes sintéticos y si contienen aceites en su formulación, como los denominados oleogeles, mejor.
- Evitar el rascado, pues empeora el estado de la piel y los eccemas. Mantener las uñas cortas y limpias para evitar la infección y mayor irritación de la piel.
- Evitar el uso de ropa de lana y productos sintéticos y apostar por el algodón.
- Ventilar bien, evitar moquetas o alfombras y convivir con animales domésticos, ya que su pelo pueden empeorar las manifestaciones alérgicas.
- Huir de las situaciones de estrés en la medida de lo posible.
Eucerin propone su gama Atopicontrol para la prevención y tratamiento de los brotes de dermatitis atópica.
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